El cañón del río Santo Domingo, en El Carmen de Viboral, es una exuberante muestra de la riqueza de las montañas antioqueñas. En medio del valle es posible avistar cascadas en casi cualquier dirección y con pendientes pronunciadas que forman ángulos de hasta 90 grados.
Este complejo hídrico conforma un circuito de caídas de agua conocido como el valle de Las Cascadas, un lugar mágico que reconforta el espíritu y satisface los sentidos de los seres humanos al sentirnos acogidos por la madre tierra.
Entre ellas, la más conocida es la cascada La Esmeralda, un imponente salto conformado por tres caídas de agua que juntas suman casi un kilómetro de recorrido.
Son algo más de 900 metros de salto en medio de la topografía agreste, que se convierte en un verdadero espectáculo para la vista de los turistas que se aventuran en una expedición por conocer esta maravilla natural y altamente cristalina.
Foto: Alexander Arias Penagos
Precisamente, las fuentes se preservan constantemente oxigenadas gracias al complejo de montañas y al gran número de rocas en sus cauces.
En esta experiencia natural también es posible encontrar diversidad de fauna silvestre con especies como el tití, la guagua, el cusumbo, el conejo de monte, el mono aullador, serpientes, entre otros.
¿Cómo llegar a la cascada La Esmeralda y al valle de Las Cascadas?
Aunque el valle de Las Cascadas y la cascada La Esmeralda está ubicado en territorios de El Carmen de Viboral (el mapa siguiente te marca la ruta justamente a través de este municipio), la mejor forma de llegar a ellas es a través de la Autopista Medellín-Bogotá, desviándose por la entrada al municipio de San Francisco y luego en la vereda La Piñuela; allí se continúa hasta la vereda La Vega.
Foto principal: Yasid Flórez
