El municipio de San Vicente Ferrer es una de las localidades que hace 205 años, y ante el aumento de su población, junto a otros 13 pueblos antioqueños fue erigido como municipio por parte de los gobernantes de la denominada, en su momento, República de Antioquia.

Así, este poblado que en época de la Colonia era centro de explotaciones mineras a través del mazamorreo y que en ese entonces era distinguido como Minerales del Castrillón, pasó a denominarse en 1814 como San Vicente Ferrer, un pueblo anclado sobre la cima de una colina que posteriormente se distinguió por su tradición en torno al fique, la cual aún hoy persiste en la producción de cabuya y de algunas artesanías en este material.

El municipio continúa hoy con esa vocación agrícola, aunque ahora es la fresa su producto más representativo; de hecho, es reconocido como el primer productor de esta fruta a nivel departamental. Alternamente se cultivan en este territorio otros frutales de clima frío como el aguacate y la uchuva, producto último que es exportado al continente europeo. 

San Vicente Ferrer es reconocido también por los armadillos o gurres que en tiempos pasados, antes de la tala de bosques indiscriminada que ocasionó su migración, tenían a este territorio como hábitat predilecto. Su trabajo aguerrido para labrar la tierra en búsqueda de su sustento, son valores que ha hecho propios la comunidad sanvicentina para definir su actitud emprendedora frente a nuevos retos y horizontes